ESCUCHAR hablar en estos tiempos en el deporte de la lucha libre de los Hermanos Dinamita, los Villanos, los Brazos, los Guerrero, los Dantés, los Wagner, los Traumas o los Garza, es tal vez algo común.
Sin embargo las dinastías de hermanos dentro de la lucha libre mexicana no son algo nuevo. Basta recordar las hazañas de los hermanos Sugi y Huroki Sito, Mario y Enrique Yáñez, los Espanto, los Ruiz, (Rizado y Rodolfo) los Hermanos Corzo, los Escobedo, los Gemelos Diablo, hasta la dinastía de los hermanos Mil Máscaras, Dos Caras y el Sicodelico.
También es y era algo normal verlos programados juntos, formando duetos o tríos en el ring. Incluso hasta la actualidad es frecuente ver encuentros de hermanos contra hermanos.
Hoy, con gran orgullo les presento a una de las primeras dinastías de hermanos que existieron dentro de la lucha libre mexicana: La de los Hermanos Guzmán Huerta. Surgió entre los años de 1934- 1936 y la formaron los hermanos Jesús, Miguel, Rodolfo y Javier, mejor conocidos dentro de este deporte como La Pantera Blanca, Black, Rudy y Jimmy Guzmán, respectivamente.
Curiosamente ellos cuatro, a diferencia de otros grupos de hermanos, no formaron un equipo estable. Y es que cada uno de ellos luchaba individualmente, en diferentes ciudades y arenas.
El mayor de ellos, mi tío Jesús, murió trágicamente en un hospital de la ciudad de Puebla después de sufrir una congestión cerebral sobre el ring. Y los hermanos sobrevivientes, después de esta lamentable perdida, continuaron practicando esta profesión a pesar de que mi abuela se los prohibió tajantemente.
Black emigró a los Estados Unidos. Rudy se convirtió en El Santo. Y Jimmy se refugió en las arenas chicas. Todos ellos continuaron luchando, a pesar de los impedimentos de su mamá, aunque cada uno por su lado.
Sin embargo, con el paso de los años, los tres coincidieron el domingo 13 de mayo de 1945 en la Arena México. Aquella ocasión en la lucha estelar se presentaron Tarzan Lopéz y Dientes Hernandez contra Ciclón Velóz y Black Guzmán.
En el turno semifinal El Santo enfrentaba a Joe Silva, mientras que en la segunda lucha Jimmy Guzmán se encaraba con Bobby Rolando. Este programa de mano es un documento sumamente invaluable, pues hasta el día de hoy es el único testimonio que indica que los tres hermanos participaron en una misma función de lucha libre.
Nos leemos la próxima semana, para que hablemos sin máscaras.
El Hijo del Santo
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