Bajo el nombre de El Santo, Rodolfo Guzmán Huerta se convirtió en el ídolo y héroe del pueblo mexicano durante la época de oro de la lucha libre mexicana en las décadas de los 50 y 60, lo que lo llevaría a ser protagonista de historietas y películas para convertirse en un icono de la cultura mexicana a nivel mundial.
En 1982, dos años antes de la muerte de su padre, el Hijo del Santo debutó en los encordados para continuar con la leyenda del “Enmascarado de Plata”, misma batuta que hoy adquiere el Santo Jr. haciendo mancuerna con su padre, con quien compartió escenario el pasado fin de semana en la capital sinaloense.
El Hijo del Santo se dijo agradecido por poder compartir los cuadriláteros con su vástago y ser testigo de su crecimiento, etapa que le hubiera encantado vivir al lado de su padre.
“Estoy muy contento, es una oportunidad muy bella que la vida me brinda. Cada presentación que tengo con mi hijo es una bonita, el tener la oportunidad de verlo crecer como deportista y como ser humano”, dijo El Hijo del Santo. “Me hubiera encantado en mi momento haber luchado de pareja con el Santo, pero él ya estaba retirado cuando yo debuté”.
Al igual que su padre y su abuelo, Santo Jr, arrancó su carrera luchistica con otra máscara, la de Tempestad. Tras una ardua preparación y su paso por Japón y Europa, recibió el legado del “Enmascarado de Plata”.
A su regreso a México, Santo Jr. ha hecho mancuerna con su padre y rápidamente han gestado una rivalidad con Rayman, quien es heredero del Rayo de Jalisco Jr., y Ángel Blanco Jr., ante quienes ha demostrado su calidad, ganándose el cariño y respeto del publico.
“He iniciado muy bien mi carrera, la gente me ha arropado bastante bien y estoy contento, pero obviamente hay mucho que mejorar, hay mucho que hacer y falta mucho entrenamiento”, comentó el nieto del Santo.
El más pequeño de la dinástica de Plata aseguró que ser el encargado de mantener viva la leyenda de su abuelo y su padre es un orgullo y una gran responsabilidad, la cual tratará de mantener viva arriba de los encordados.
“Es un orgullo, es un honor, es mucha responsableidad pero con mucho gusto la acepto y trato de ser el Santo Jr. que merece el publico”.
El retiro del Hijo del Santo cada vez está más cerca y, aunque no lo quiso asegurar, aceptó que su presentación en el Palenque pudo haber sido la última en Culiacán. Por lo que en los próximos años Santo Jr. tomará la batuta del “Enmascarado de Plata” a lo que su padre aseguró que tiene todas las cualidades para mantener viva la leyenda.
“No puedo adelantarme pero puedo decirte que es un muchacho que está técnicamente muy bien preparado y tiene lo que necesita El Santo, que son valores morales, respeto por el publico, por la lucha libre, por sus compañeros”.
“¿Qué te puedo decir?, es mi hijo, pero tiene lo que se requiere para llevar esta máscara”, finalizó el Hijo del Santo.
- Cortesía: http://beta.noroeste.com.mx/ y Ernesto Gutierrez
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