GAME OVER
Los superhéroes de origen mexicano, han dejado en claro que la justicia es su único modo de vida. Incorruptibles y leales a este principio, durante más de medio siglo estos luchadores de la justicia se han enfrentado a criminales comunes, narcotraficantes hasta vampiros y extraterrestres.
Para entender a los súper héroes mexicanos tenemos como uno de los máximos exponentes al Santo: El Enmascarado de Plata, del cual su leyenda comenzó en 1952 de la mano del dibujante José Guadalupe Cruz, quien tomo a un luchador que estaba con buena fama en la lucha libre, convirtiéndolo en el primer personaje luchador de la historieta mexicana. La fama del Santo en los comics hizo eco a nivel nacional, ya que marco las bases del personaje en el cine. El comic contaba historias en la que los villanos eran gangsters, asesinos y ladrones citadinos, presentando al personaje como un justiciero urbano cimentando así el mito que se formó alrededor de su figura.
Con el Santo marcando las bases del comic nacional, otros luchadores también tuvieron su oportunidad en los comics como Blue Demon, Black Shadow, El Cavernario Galindo y Tinieblas, aunque la historia de un personaje proveniente del pequeño y mítico pueblo de Ixtac, daría nueva identidad a los héroes en los comics.
La historia de Chanoc fue creada por el escritor Martín de Lucenay y el dibujante Ángel Mora, quienes en 1959 nos presentaron como un pescador de oficio y aventurero por vocación, siempre motivado a defender el ecosistema pesquero y la fauna marina. Basado en un folleto creado por escritores franceses. En 1969 Guillermo Mendizábal, revivió al personaje de Fantomas, un Robin Hood modernizado conocido como la amenaza elegante que conto con un gran éxito en su publicación. Aunque en 1963 nacería en la radio un héroe que no se valía de la violencia para derrotar a los villanos.
A medio siglo de vida del comic mexicano, tenemos poco más de 30 años en los que no se ha creado un “héroe” nacional para las viñetas, si bien los luchadores de la lucha libre han intentado llenar ese hueco, es indudable que El Santo y Kalimán, son los más grandes héroes de ficción que México le ha heredado al mundo.
Cortesía: https://lavozdgo.com y Omar García Rosales
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