martes, 18 de abril de 2017

Personajes de la Vía y de la Vida Gustavo Seclen Menchola "El Chiclayano"









Mi infancia y juventud la viví en Catia, específicamente en la urbanización Colinas de Urdaneta. En la planta baja del edificio estaba un modesto gimnasio. Éste había sido levantado con mucho sacrificio por el recordado profesor Pirona. Un atleta de gran corazón, excelente luchador e instructor. Allí “el profe” nos enseñaba a los chamitos, la teoría y las técnicas básicas de lucha libre. Todos soñábamos con ser luchadores famosos. Unos “sucios” (malos) y otros “limpios” (buenos). Era la época en que se transmitía por televisión la lucha libre desde el palacio de los deportes de la avenida San Martín. Uno de los luchadores “limpios” que más admiré, hoy es nuestro entrevistado, Gustavo Seclen Menchola... “El Chiclayano”.























Gustavo Seclen nació en Chiclayo, tercera ciudad del Perú. Su madre, de oficios del hogar, su padre, Octavio Seclen, notario público en su ciudad. El Chiclayano llegó a Caracas con 24 años de edad. Actualmente tiene 84. Siempre ha vivido en la parroquia Santa Teresa, cerca del bullicioso mercado de Quinta Crespo. Ha realizado innumérales actividades, a saber: fútbol, básquetbol, natación, trote, lucha libre. Fue corresponsal de farándula internacional, Torero. Actualmente es instructor deportivo, masajista, compositor, escritor, poeta, actor y fotógrafo. Confesó ser un enamorado de la historia de Venezuela y estudioso de la vida de Simón Bolívar. También es muy activo y buen conversador.

¿Cuándo comienza tu inquietud por la lucha libre? 
Eso fue allá en la escuela de artes y oficio de Chiclayo, un buen día presentaban un programa de lucha libre, yo andaba paseando con una novia y otros muchachos amigos cuando nos enteramos del evento. Nos trepamos por unas paredes para colearnos hacia el local donde se presentaban los luchadores. Con sigilo nos metimos por debajo de las gradas y mirábamos entre las piernas de la gente. Vimos que un luchador, que posteriormente combatió aquí con el nombre de “El Tanque Americano”, estaba estrangulando a otro llamado “Jack Sabú” que botaba espuma por la boca. Ese fue el primer combate de lucha libre que vi en mi vida. Aquello me motivó.

¿Dónde te inicias como luchador?
Fue allá en Chiclayo, donde desde muy joven, comencé en la lucha libre. No conocía técnicas ni nada de nada. Combatía por guapo, aventurero, por querer hacer famosa mi ciudad. Después luché en Lima, Arequipa. Luego en Chile me instruí sobre esta disciplina.

¿Ya te llamaban Chiclayano?
No. La gente de mi ciudad me llamaba “Robertito”, porque una vez me puse a defender a un torero y en burla me decían así.

¿Y Profesionalmente?
Bueno, déjame contarte antes lo siguiente. Un equipo de luchadores habían llegados a mi ciudad y se enfermó uno de ellos. Buscaban a un tipo guapo, corpulento, para ganarse 50 soles por luchar, pero nadie quería. Fueron hasta los muelles a buscar aquellos forzudos estibadores, pero ninguno acepto. Yo les servía de guía y los llevaba a conocer los lugares de Chiclayo. Recuerdo que en la playa de Pimentel jugaban tirándome entre ellos como si fuera una pelota. Eran tipos de 140 kilos, yo solamente pesaba 64. Fue así como nos hicimos amigos. Luego aquellos luchadores me llevaron al hotel donde estaba el apoderado y me lo presentaron. Éste me pregunto que si quería suplir al luchador faltante y le dije que sí. Fui el único osado, en toda la ciudad, que aceptó, a pesar de no tener experiencia como profesional. Yo entendí cuando este apoderado le dijo en ingles al que me lo presentó...”que suba, luche y en dos minutos lo estrangulen”. Ese fue el comienzo de esta profesión que posteriormente me trajo a Venezuela.

En esa época era futbolista, en primera división del equipo de fútbol mas famoso de mi ciudad, “Hermanos Aurich”. Una vez que la prensa publica la noticia de que yo lucharía, muchas de las personas que me conocían vinieron a mi casa para decirme que ellos me esconderían para que no peleara porque esos luchadores me matarían,. Les dije ¡no déjenme tranquilo yo quiero luchar..!

Mi primer combate lo realicé en una plaza de Toros, que era más grande que la del Nuevo Circo de Caracas. Lucharía con el negro Sabú. Yo no tenia zapatos de lucha, pantalón de baño, ni nada. Entonces a un tío mío que era de mi talla, le robé los zapatos de jugar basketball y un pantalón de baño, y a mi abuela le quité una toallita, con eso subí al cuadrilátero a luchar. Pero antes de subirme, Nickolson, El Tanque Americano, me aconsejó: ¡Hey boy!...mucho cuidado, tu siempre cerca de soga, si él agarrarte brazo, cabeza o pierna, tu agarrar soga. Cuando Sabú me agarro por el cuello, rápidamente me aferré a la cuerda. La gente gritaba: ¡soga!...¡soga!, y el hombre no me soltaba, entonces el público levanto las sillas para tirárselas y así fue que me soltó. Ya en el tercer asalto el tipo se me vino encima, rápidamente me agarre con los dos brazos de las sogas levante las piernas y en lo que se acercó le di con los dos pies y salió rodando hasta la otra esquina. Gracias a mi agilidad adquirida en el fútbol pude realizar la pericia. Después me enteré que el movimiento que hice se llamaba “tácle”. Había pasado media hora de lucha entre un novato de 64 kilos contra un luchador profesional de 130. Seguimos combatiendo y entonces él me planchó, 1,2,3, y ganó la pelea, pero para el público, el héroe fui yo, “Robertito de Chiclayo”.

Posteriormente organizaron combates boxísticos con jóvenes de mi peso, pero a todos les gané. Así comenzó mi vida como luchador. Transcurrido un tiempo seguí jugando fútbol con el equipo de “Juan Aurich”. Luego me fui a Lima, allá viví con mi tío Ismael Menchola, me inscribí en un campeonato de lucha libre organizado por la empresa de Mack Aguirre, pero pasaron 1,2, 3 programas de lucha y no me llamaban a combatir. Entonces me puse a aprender lucha en una escuela limeña. Una vez iba entrando al gimnasio y me conseguí con aquel empresario y le dije que renunciaría, porque no me ponían a pelear, él me contesto ¡no¡, no renuncies, la semana que vienes peleas!. Me llevaron a luchar a un sector muy poblado llamado La Victoria, en ese lugar quedaba “El Trianón” donde presentaban la lucha libre. Cuando subo al cuadrilátero, me gritaban...¡Robertito! ¡Robertito!...entonces fue cuando me di cuenta que entre el publico estaba medio Chiclayo, fue hasta el panadero de mi barrio a verme!. En esa plaza gané ese y varios combates más. Luego luché en Luna Park, ubicado en pleno centro de Lima. Entre los años 65 y 68 me convertí en un estrella, ya las peleas mías eran la estelares. Luché 3 años mas, rompí con el empresario boxístico Mac Aguirre, porque era muy egoísta. Luche un tiempo en Chile, Perú, Ecuador, donde realice una corta temporada. Luego en Bogota, Cali, Girardot y en otras ciudades. En noviembre del año 49, el empresario Febles Cordero me trajo de Cali a Caracas, para luchar en la plaza de toros del “Nuevo Circo”, lo hice hasta el año 53. Al disminuir la asistencia del público, le dábamos un descanso a las presentaciones. Un luchador peruano llamado “El Zorro italiano”, aprovechando la pausa se fue a la Habana, donde recién comenzaba la temporada de lucha libre.

Él me consiguió contrato en Cuba y me fui para allá a luchar por 2 años, gobernaba el presidente Socarras, a quien Batista le dio el golpe de estado.

¿Cuándo regresas a Caracas?
Tres meses después de estar Batista gobernando, volví a Caracas contratado por Pablo Morales y Oscar Prieto. Luego estos señores, con las ganancias que obtuvieron de la lucha libre, compraron el equipo de béisbol Los Leones del Caracas.

.-Ya en Caracas comienza una excelente temporada para la lucha libre. Los mejore peleadores del mundo se enfrentaron en el Nuevo Circo Caracas.-

¿Fuiste amigo de el Gran Lotario?
Cuando le conocí en la Habana, él era estibador, no sabia luchar. Yo hice que lo trajeran a Caracas, le enseñe tres llaves, lo recomendé con el empresario Gilberto Becerra, y queriendo explotar la parte fuerte de Lotario, preparé para Becerra un combate de exhibición, pero antes le dije al oído: Negro, las llaves que te enseñé, ¡aplícamelas!. Y comenzamos a luchar, primera llave, ¡pum! me saca. Segunda, me voy a la lona. Tercera, caigo nuevamente. El empresario al ver aquello dijo: ¡Este negrito lucha la semana que viene!... Así comenzó Lotario, quien combatió también en Estados Unidos, Alemania, Francia y Europa. 

También de Cuba recomendé a “Cruz Diablo”,un luchador que se hizo muy famoso en Venezuela

¿De las peleas realizadas en Venezuela con cual te has sentido más triunfante?
Yo fui un luchador que peleaba para la empresa, para el espectáculo, para que el público saliera contento. Podía enfrentarme al contrincante mas malo del mundo y aquella pelea quedaba como una de primera, porque yo la dirigía. Le decia al contrario, ¡pégame!...¡no me sueltes!...¡tírame!... ¡dame!... ¡sígueme pegando!. Es simplemente un espectáculo.
.-Comenta que cuando los hermanos Curro y César Girón eran niños, éstos le asistían como Secund. cada vez que luchaba en la ciudad de Maracay. Así se lo hicieron recordar, muchos años después, los dos grandes toreros.-

¿Con cuáles luchadores presentaste mejores espectáculos de lucha?
Con el Dragón Chino (Carlos Wilson Prusing) que no era chino, sino chileno. Renato El Hermoso, el español Vicente García, Huracán Ramírez, Cavernario Galindo. He luchado con muchos chilenos, mexicanos, argentinos, norteamericanos y cubanos.

¿Y con Bassil Battá?
No, ese no era luchador, él era un comerciante en telas, muy vivo. Se mezclo en la lucha porque era empresario, entonces todos los luchadores lo trataban en el ring con delicadeza, porque era el que les pagaba, entonces el resaltaba en las peleas.

.-El Chiclayano libró mas de siete mil combates. Cuenta que en Cuba peleaba de domingo a domingo. Realizó constantes giras por México, Venezuela, Cuba. Un día decidió no viajar más y fijó residencia en Caracas. Su primer esposa fue una francesa, Jacqueline. tuvieron una hija (hoy cuenta con 43 años). Por no querer irse a vivir a Francia, se divorcio de Jacqueline y ésta se marcho a su país con la niña. Al tiempo El Chiclayano se casó con una venezolana, hija de padres alemanes, actualmente tiene 4 hijos y 9 nietos.

¿Llegaste a ser un ídolo?
Modestamente te digo que sí, sobre todo en Cuba. No podía caminar por las calles o ir a la playa, no tenía vida privada, la gente me acosaba.

.- En su gimnasio, que está anexo a su residencia, se han forjado muchos luchadores de fama internacional -. Dice: “Los mejores luchadores del país han salido de aquí”. Sus hijos, Gustavo fue cinturón negro y campeón nacional en Kárate dos veces y Roberto, en la actualidad se presenta en el ring como El Chiclayano Júnior.

¿Cómo llegas a ser actor y fotógrafo de televisión? 
Eso tiene su historia, Una de las condiciones del buen luchador es que tiene que ser excelente atleta y un buen actor.

¿O sea que todos esos golpes y llaves de la lucha libre son falsos?
¡Es un espectáculo!
-Bueno “chicla”, retomemos la pregunta... ¿Cómo llegas a ser actor y fotógrafo de televisión?

Por mi fama como luchador venían aquí a buscarme para que apareciera en los programas musicales y en las novelas de televisión.

¿Quiere decir que ya no luchaste mas?
No, yo compartía la lucha libre con la actuación. Déjame decirte que fui el primer luchador que salio por televisión en Venezuela. Era un programa que Transmitió TVN canal 5, dedicado al General Marcos Pérez Jiménez. Quienes me presentaron fueron; Pancho Pepe Crocker y Henry Altuve, narrador y comentarista respectivamente.

¿Y lo de la Fotografía? 
Una vez que estaba de visita en mi pueblo, me encontré con un luchador amigo mío llamado “El Yanqui”, hermano de un empresario boxístico, los dos íbamos caminando y hablando, cuando de repente vemos a una vaca amarrada de un árbol, como yo siempre cargaba una camarita de fotografía le dije a mi amigo, ¡Yanqui!, quítate la camisa y sostén a la vaca por los cuernos, que yo te voy a tomar una foto de tal manera que no se vea que está amarrada. El hombre sujetó a aquel animal como pudo y le tome la foto. Se la llevé al hermano empresario y al día siguiente fue publicada por la prensa de mi ciudad junto a una leyenda que decía: “El Famoso Yanqui, entrena peleando con un toro bravo”.

¿Entonces esa fué tu primera foto profesional? 
Sí, el hombre me pago por eso 10 soles y eso me gusto. Ya viviendo aquí en Venezuela les decía a otros luchadores: Levanta ese tronco, esa piedra y “click” le tomaba su fotografía, me pagaban y por allí comenzó todo

¿Cómo aprendiste a revelar y copiar fotos?

Todo eso me lo enseñó un gran amigo, Luisito Noguera, un fotógrafo cuyo padre trabajaba en el diario El Universal.

.-Es impresionante la cantidad de fotografías que tiene el Chiclayano en su oficina. En grandes cajas, baúles y sacos, reposan las gráficas de cuanto programa, artista o personaje de otra naturaleza, han desfilado por las pantallas de la televisión.

Aunque él no me lo mencionó, considero que necesita el apoyo de algún ente competente para la clasificación y curaduría de este valioso material , que no temo en catalogar como parte importante de la memoria gráfica de nuestra televisión-.

.-También las paredes del local están vestidas con carteleras y en ellas mosaicos fotográficos donde podemos ver al Chiclayano al lado de personalidades internacionales. Olga Guillot, la India de N.Y., Celia Cruz, El torero Cesar Girón, Tito Rodríguez, Charles Aznavour, Sammy Davis Jr., Julio Jaramillo, son solo algunos de ellos-.

¿Y cómo lograbas que los artistas se fotografiaran a tu lado? 
Cuando me llamaban de la televisión para actuar en los programas, siempre llevaba mi camarita. Muchos artistas o personajes ya me conocían por la lucha libre. Solía encontrármelos en los estudios o los pasillos del canal. Yo les tomaba fotos y aprovechando la ocasión me fotografiaba al lado de ellos. Luego comenzaron a comprármelas y aquello lo vi como una entrada extra de dinero.

Por cierto te voy a contar una anécdota que tiene que ver con lo de la fotografía. Estábamos grabando con Radio Caracas Televisión, una novela de época en una hacienda, yo era un capataz. Los actores principales; Marina Baura y Raúl Amundaray eran los dueños de la hacienda, En una escena aparece Marina Baura sentada frente a una mesa pagándole el salario al personal. Yo cobro de primero y salgo de escena. En la fila quedaban varios peones(extras), esperando su salario, entonces agarré mi camarita y le tomé fotos a cada uno de ellos a medida que iban cobrando. Luego todos querían que les vendiera la foto al lado de aquella excelente Actriz . Al terminar la escena La gran Marina Baura se reía junto a Raúl Amundaray y me decían: ¡Chiclayano tu si tienes agallas, te sales de la escena, tomas las fotografías y vuelves a entrar a ella, hay que ver que tu no pierdes tiempo para nada ja,ja,ja¡

¿Tomas fotos por tu cuenta o eres empleado de alguna empresa?
Yo trabajaba por mi cuenta, les hacía fotos a los artistas nacionales en la T.V., y en los teatros, y por contrato a las empresas que traían los internacionales. 

Actualmente continuo tomando fotografías en la T.V., porque tengo que vivir, tengo que comer, no tengo pensiones, ni jubilaciones de ningún tipo.

¿Cuándo comienza tu afición por los toros?
cuando tenía unos 5 años, fue allá en mi ciudad, Chiclayo, pero los primeros pasos los doy aquí en Caracas. Una vez vinieron unos señores aquí a la casa, para que toreara un novillo por mil bolívares, a la final nos transamos por mil quinientos. Fui al Nuevo Circo a entrenar. Allá me conseguí a “El Diamante Negro”, al vernos nos saludamos, me presto su capote y su muleta y fue él quien me dio las primeras indicaciones de cómo lidiar con un toro. Así como comencé en esta faena. Luego lidié con novillos en Sartenejas, La Victoria y Valencia .

¿También eres compositor?
Si señor, también soy miembro de la Sociedad de Autores y Compositores de Venezuela, SACVEN.

.-Gustavo Seclen o El Chiclayano, Le han grabado unas 70 canciones. Estelita del llano, Mario Suárez, Felipe Pirela, Olga Guillot, Celia Cruz, Leo Marini, Daniel Santos, Tito Rodríguez, Julio Jaramillo. Las orquestas Los Melódicos, Porfi Jiménez, Los Dementes, Ray Pérez, son solo algunos de los difusores de sus inspiraciones. Me mostró una serie de partituras musicales y letras. Entre ellas unas dedicadas a los equipos futbolísticos Barcelona y Real Madrid. Otra inspirada en la labor del periodista. Una dedicada a el papa Juan Pablo II-. (canta parte del tema dedicado al papa) 

En la indómita Polonia / nació un santo varón / que predica por la paz / con fervor y devoción / enterremos la violencia/ ya dejemos de pelear / respetemos las creencias / cada quien con su ideal / blancos, negro y amarillos / todos hijos de Dios son / la virgen María ruega / por que haya comprensión. / olvidemos los rencores / ya dejemos de pelear / que la lucha fraticida / con el mundo acabará.

¿Ejecutas algún instrumento musical?
Yo lo único que toco es piernas y nalgas, cuando estoy dando masajes (risas)
Cuando me viene la musa de una melodía, la silbo, luego llamo a algún músico amigo para que me escriba la partitura.

¿Tu eres periodista?
Colegiado no, pero fui corresponsal de las revistas Show de Cuba. Bambalinas de México, corresponsal de farándula de New York y Puerto Rico. Redactaba las notas y las enviaba con fotografías tomadas por mi.

.-Ya despidiendo la entrevista se acuerda de algo más y me dice que tiene a la disposición de cualquier productor audiovisual dos guiones cinematográficos: “El Sabatista”, inspirada en su vida como luchado y “Orinoco Lagrimas y Sangre”, film de aventura. Igualmente ésta escribiendo su biografía que comienza a los 5 años de edad.

.-Finalmente me vine impresionado de la inmensa fortaleza que ha tenido Gustavo Seclen Menchola ó El Chiclayano, para ejercer tantas tareas a su paso por la vida. Realmente son pocos los seres humanos que en su existencia marchan con seguridad por un futuro mejor. Otros lo hacen mas lento y algunos ya se quedaron parados.-

¡Cuando muera quiero que mis cenizas sean regadas en el Cerro El Ávila, para estar cerca de Caracas...siempre!
Gustavo Seclen Menchola, El Chiclayano.

Cortesía:http://www.nuestragaita.com/ y Héctor Márquez "Pomponio"

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